Herramienta fundamental con el objetivo de prevenir, estabilizar o mejorar las alteraciones del sistema respiratorio lo que favorecerá una mejora en la calidad de vida de los niños y sus familias. 

Nuestro objetivo es facilitar la expulsión y eliminación de secreciones, disminuir la disnea (sensación de falta de aire) y aumentar la tolerancia al esfuerzo.

La fisioterapia respiratoria puede ayudar a conseguir un mejor estado general del niño, ya que favorece el descanso y la alimentación. Concluyendo en una mejor calidad de vida.

¿En qué consiste?

Tratamiento a través de técnicas manuales y procedimientos basados en la fisiología del aparato respiratorio, con lo que se consigue un drenaje de las secreciones, disminución del riesgo de infecciones y una mejor ventilación.

A QUIÉN SE DIRIGE

Bebés o niños con problemas respiratorios comunes en la época de invierno como bronquiolitis, bronquitis y neumonías.
Bebés y niños con problemas respiratorios asociados a alguna patología neurológica o que presenten enfermedades crónicas respiratorias como la fibrosis quística, enfermedades congénitas del pulmón, asma, etc.